Una experiencia inolvidable de viaje Blog
Una experiencia inolvidable de viaje, al igual que una emoción muy grande que no me dejó dormir la noche anterior. Estaba emocionada a tal punto, que todo lo que podía suceder para estresar mi llegada al aeropuerto sucedió.
Gracias a Dios iba con tiempo y solamente fue el susto, que ahora me causa gracia. En ese momento no me pareció chistoso ni un poquito, no podía siquiera imaginar la idea de no lograr vivir la experiencia que me esperaba.
Soñaba con conocer Europa, en especial como ya saben mi lugar favorito. En esta ocasión, les hablaré de mi vivencia en el viaje y lo increíble que es hacerlo saliendo de noche en América y llegar de día a Europa.
Pensarás que estoy loca, de pronto un poco, pero es la manera en que logré ver el espectáculo más increíble para mí hasta el momento. Poder ver el meridiano de Greenwich en todo su esplendor.
Esa línea entre la oscuridad y la luz se va moviendo por las ventanas del avión si están abiertas claro está. Hasta que la ves perfectamente frente a tus ojos, que no pueden creer que sea una línea recta que divide la noche del día.
Hablo en esta ocasión de mi experiencia en mi primer país en Europa, que fue Madrid. Si has visto mi contenido he contado de los otros lugares que conocí, me faltaba contarte sobre esa experiencia al cruzar el charco.
Al llegar se nota un ambiente europeo y ordenado, solamente puedo decir que no me agradó fue el olor a cigarrillo que sentí por todas partes. No puedo evitar comentarlo, porque no me gusta el olor y en ese momento fue lo que más percibí.
Para transportarme del Aeropuerto de Barajas al centro de Madrid, fue un recorrido bastante largo. Lo que ayudó a sobrellevar el trayecto, fue que se lograban apreciar grandes empresas a los costados de la vía.
Al ir llegando al centro de la ciudad, se empezaron a visualizar los edificios habitacionales. Estuve en los edificios que estaban cerca de la ciudad, pero aún faltaba por llegar al centro de Madrid.
El hostal donde nos hospedamos estaba cerca de la estación del metro, llamada Puerta del Sol. Algo pequeño, pero bastante cómodo y con un servicio agradable y atento.
El movimiento de personas, en el área de La Puerta del Sol, es constante durante todo el día. Principalmente desde las siete de la noche hasta las doce de la madrugada, que es cuando se reduce la cantidad de personas.
La comodidad de tener una entrada y salida del metro a tan solo unos pasos cruzando la calle frente al hostal, no pudo ser mejor ubicación. Y más porque por esa área, se encuentran tiendas y almacenes de todo tipo.
Adicional, puedes disfrutar de gran cantidad de restaurantes y actividades recreativas. Y por medio del metro, se podía ir al resto de los lugares turísticos de la ciudad.
Por falta de tiempo, no logré conocer mucho de Madrid y por eso no tengo fotos para mostrar. Porque fue un viaje de pocos días para luego ir a mi lugar favorito, que fue el lugar principal a visitar.
Puedes saber más sobre mí lugar favorito, en mis contenidos anteriores. Allí te cuento los detalles y experiencias vividas, en ese lugar tan mágico que soñaba con conocer.
En Madrid conocí pocos lugares, entre esos La Puerta del Sol, sus callejones, ventas ambulantes, almacenes y demás actividades tanto diurnas como nocturnas. Que sin importar que día de la semana sea, las personas igual salen.
Yo tan pronto se pueda y logre tener la oportunidad, quisiera conocer más del llamado viejo continente ¿Te animas a cruzar el charco como me enseñó mi padre a decirle al viaje transatlántico?